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La autora es una princesa "sin corona", exiliada voluntariamente en Francia, donde llegó siendo una bebé. Su madre perteneció a la familia Real turca, que fue expulsada del país, ante la llegada de la dictadura de kemal Atatürk. El libro autobiográfico descubre la vida previa a la revolución, el califato, las costumbres de la clase gobernante y, principalmente, el desempeño (casi insignificante), de la mujer dentro de un Estado decididamente musulmán. Al concluir la Primera Guerra Mundial, con la derrota de Turquía que era aliada de Alemania, los privilegios de los califas y sus familias, se ven deteriorados hasta la cárcel, el exilio y el fusilamiento. Kenizé Mourad es hija de un Rajá indú, a quien no conoce, y de una princesa turca, que la lleva con un fiel sirviente a vivir a París, donde comienzan otra clase de necesidades existenciales diarias. Hoy, Kenizé Mourad es periodista de un importante periódico francés, ha viajado por toda Asia y Europa, se ha reencontrado con su padre, una experiencia que narra en el libro "Un Jardín en Badalpur" (que luego comentaremos) y vive actualmente su entrada a la ancianidad, tranquilamente en la Ciudad Luz. Es ciento por ciento recomendable, con un final desgarrador, de un drama humano que no se podrá olvidar fácilmente.

Recomendable para este puente.

Linda Beleta